Cuenta la historia, que luego del nacimiento de Jesús, tres reyes magos, Melchor, Gaspar y Baltazar, observaron la estrella de Belén y supieron que el Rey de Reyes había nacido, por lo que emprendieron su largo viaje para llevarles unos obsequios: mirra, oro e incienso.
Esto se recuerda en todo el planeta, y en especial en España, donde se realiza la tradicional Cabalgata de Reyes.
Entre las cabalgatas más largas y multitudinarias, están las que se celebran en la ciudad de Madrid y Barcelona. La primera concluye de manera apoteósica en la Cibeles, con la lectura de una carta que los Reyes dirigen a todos los niños; la de la Ciudad Condal recorre los principales barrios y concluye en la Font Màgica de Montjuich.
Los Reyes Magos llegan a Mallorca por mar, desembarcando en el Muelle Viejo de Palma ante el júbilo de miles de familias. Después sus carrozas cargadas de regalos, música y dulces recorren el casco histórico hasta la Plaza de Cort. Si eliges la capital balear para pasar tus vacaciones de Navidad, asistir a la cabalgata es el mejor broche.