Se acerca la navidad

Esta fecha tan importante para los cristianos se acerca y debemos ir pensando en nuestros seres queridos, amigos y familiares con quienes pasaremos la noche buena.

Cada año que transcurre significa para ese tiempo de reflexión, también un momento de agradecimiento a Dios, por todas las cosas que nos ha brindado a lo largo del tiempo transcurrido. Es cierto que pudo haber tiempos difíciles, pero nada obsta a seguir adelante, siempre esforzándonos a ser mejores personas, procurando la felicidad y manteniendo la esperanza en nuestros amigos y familiares, quienes son los que siempre estarán a nuestro lado. 

La navidad se acerca, y con ella, momentos de alegría y reflexión. 

No olvidemos que las celebraciones son buenas, pero más que nada lo que se conmemora es el nacimiento (natividad) de nuestro padre, de aquel por el que todas las cosas fueron hechas, nuestro salvador y señor, nuestro amigo fiel, nuestro compañero y redentor. 

A los niños les gusta la navidad por los regalos, por las sorpresas, la alegría de reunir a toda la familia, los primos que cada año vienen a acompañar la celebración. Esa misma alegría de los niños debemos compartirla todos, pero no por los regales (que si bien no están nunca demás), sino por el regalo más glorioso de toda los tiempos y para toda la humanidad, el regalo de Dios a los hombres, de dar a un único hijo para salvación nuestra. Ese es el sentido de la navidad, no los regalos ni la fiesta. Todos sabemos que la celebración tiene que tener como principal actor al cumpleañero, y no relegarlo al último lugar. Esta es una breve reflexión, pues se acerca la navidad, y debemos prepararnos con nuestros familiares y amigos.